El Festival de Música de Cámara Gerardo Merediz Hill nace con el propósito de promover y difundir la riqueza de la música de cámara en México, ofreciendo un espacio que eleva el espíritu y fomenta la apreciación del arte a través de interpretaciones magistrales de músicos residentes en el país. Realizado en un recinto con una acústica y arquitectura excepcionales, este festival invita al público a descubrir la profundidad y belleza de un repertorio cuidadosamente seleccionado. Además, el festival rinde homenaje a la vida y legado de Gerardo Merediz Hill, un músico excepcional cuya pasión por la música de cámara y su incansable dedicación a su difusión continúan inspirando a generaciones.
Semblanza de Gerardo Merediz Hill
Gerardo F. Merediz Hill (1956–2023) fue un violonchelista mexicano de amplia trayectoria, que dedicó más de 40 años a la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, dejando una huella imborrable con su talento y pasión. Formado en el Conservatorio Nacional de Música bajo la guía de reconocidos maestros como José Suárez y Leopoldo Téllez, su carrera se extendió más allá de la música, revelando una faceta que abarcó múltiples disciplinas creativas y técnicas.
Además de su destacado trabajo en composición e interpretación musical, Gerardo se destacó en el diseño gráfico, diseño web y programación. Creó diseños para vajillas, portadas de discos, calendarios y desarrolló sitios web completos, incluyendo plataformas de comercio electrónico. Su habilidad para combinar creatividad, técnica y arte lo convirtió en un creador integral cuya obra trasciende fronteras y disciplinas.
Su legado vive en la diversidad de su talento y en las generaciones de músicos, artistas y creativos que continúa inspirando.
Carlos Mijares Bracho (1930-2015), fue un importante arquitecto mexicano formado en la Escuela Nacional de Arquitectura de la UNAM, con profesores como Luis G. Serrano y Mathías Goeritz.
Característicos de su estilo fueron, el interés por la utilización del tabique rojo expuesto, como elemento formal y recurso expresivo y la búsqueda de la emoción a través de la geometría, recurriendo en muchas de sus obras al uso de arbotantes, arcos, pilastras, trompas y muros paralelos y retomando tradiciones históricas para incorporarlas a la arquitectura contemporánea en forma de bóvedas y tragaluces, que enriquecieron sus espacios interiores con infinitos juegos de texturas, luces y sombras.
De 1955 hasta 2014, desarrolló una larga labor como docente en la UNAM, y entre 1967 y 1971, en la Universidad Iberoamericana, impartiendo diversas cátedras y talleres dentro y fuera de México, además de publicar cinco libros e infinidad de colaboraciones y artículos en revistas culturales y de arquitectura.
Su obra se podría catalogar en tres grupos: casas-habitación, edificios industriales y templos religiosos. Algunas de sus creaciones más destacadas serían:
El Festival de Música de Cámara “Gerardo Merediz Hill” se congratula de poder ofrecer estos conciertos en el incomparable marco de una arquitectura excepcional.